Los que tiemblan al ver a Caro en la cárcel

Tienen mucha razón quienes afirman que, con la detención de Rafael Caro Quintero, saldrían a la luz, en Estados Unidos, los nombres de muchos políticos, entre los que destacan el actual directivo de la Comisión Federal de Electricidad y exsecretario de Gobernación en el gobierno de Miguel de la Madrid, Manuel Bartlett.

La historia se repite, pero ahora el capo sinaloense, fundador del llamado Cártel de Guadalajara, no estará en una prisión mexicana, sino que se llevará a tribunales estadounidenses, donde lo acusan del asesinato del agente de la DEA, Enrique Camarena Salazar.

El gobierno de Estados Unidos, y en especial la misma DEA, tienen mucha información como participaron en los interrogatorios agentes de la CIA y policías mexicanos, quienes informaban directamente a Manuel Bartlett de lo que ocurría con las torturas que infringieron al policía estadounidense que servía de contacto entre las mafias productoras y comercializadoras de drogas en Sinaloa y el trasiego en la Unión Americana. De alguna manera era un infiltrado en las estructuras de Rafael Caro y de Ernesto Fonseca Carrillo.

Según fuentes estadounidenses, Bartlett no habría informado de las torturas a Camarena y al helicopterista Alfredo Zavala en un rancho de Quintero, en Michoacán.

Pero, todo ello quedó constancia en loa autos del juicio que se le llevó a cambo al sinaloense y a otros capos del narco de los ochentas. Incluso en una serie de Amazon, llamada El Último Agente de la DEA, hablan algunos de los policías y narcotraficantes que participaron en el interrogatorio tanto de Camarena, como del helicopterista.

Era del dominio público, así como de as autoridades de ambos lados de la frontera, que existía una extensa red de protección al cartel de Guadalajara donde estaban involucrados jefes de policía, mandos militares y funcionarios de alto nivel del gobierno mexicano. Se mencionaba concretamente la Secretaría de Gobernación, donde despachaba Bartlett.

El origen de ese secuestro fue el descubrimiento del un rancho con más de 40 hectáreas sembradas de mariguana. Aparentemente Kiki, conocía la existencia de ese sembradío, que era resguardado por militares y agentes de la extinta Dirección Federal de Seguridad.

Ese rancho, conocido como El Búfalo, propiedad de Caro, estaba destinado para exportar a Estados Unidos la droga, pero el que fuera comandante de la Interpol, Miguel Aldana, por instrucciones presidenciales (Miguel de la Madrid), en un aparatoso operativo cayeron casi 500 policías federales y soldados en ese rancho y destruyeron la mariguana. Este fue considerad el golpe al narco más importante de la historia, en aquel año.

Bueno esto es historia que materialmente es del dominio público. Lo relevante está en muchos personajes de aquella época, en el gobierno de Miguel de la Madrid, que ahora están en el escenario político.

La principal figura es Bartlett.

Difícilmente se podría entender la política de los ochentas, si no se veía al que fuera la siniestra figura del actual director de la Comisión Federal de Electricidad. En Estados Unidos, podrían saltar a la luz pública otros nombres que servían de protección al narcotráfico de aquellos años y, de ahí, edificaron enormes fortunas.

Incluso, habría otros nombres que nunca han abandonado el escándalo por su corrupción. Al tiempo… al tiempo.