El papa está preocupado por la violencia en México... o eso dicen que dijo
La preocupación de Francisco, como dijo Estela de Carlotto, recuerda aquel episodio de la filtración de una carta en la que el pontífice habló sobre la "mexicanización" en Argentina.
El papa Francisco dice estar preocupado por la violencia en México, o al menos eso asegura Estela de Carlotto, quien tuvo una audiencia con el pontífice este jueves.
De Carlotto es integrante de las Abuelas de Plaza de Mayo, una organización no gubernamental que se dedica a localizar y restituir a sus legítimas familias a todos los niños desaparecidos en la última dictadura argentina.
La activista se encontró con el pontífice argentino, como parte de las actividades por la investidura doctor honoris causa que le concedió la Universidad de Milán. Este reconocimiento fue entregado a la también argentina Vera Vigevani Jarach y la mexicana Yolanda Morán, coordinadora de la organización Fuerzas Unidas por Nuestros Desaparecidos en México.
Al final de la audiencia papal, en declaraciones a la prensa, De Carlotto aseguró que hablaron de violaciones a los derechos humanos. En un video compartido en redes sociales, se le escucha nombrar la distinción a Morán "otra de las premiadas en Milán es de México" y al referirse al país, menciona:
Él dijo (el papa) que está muy preocupado porque, lo que está pasando en México es insólito, tanta muerte, dice que mataron a dos sacerdotes...
La preocupación de Francisco por la seguridad de otros miembros de la Iglesia en México es un tema que ha "manifestado" desde febrero de 2015, pero desde entonces, alguien más se ha encargado de hacerlo público.
Un mensaje privado del pontífice a Gustavo Vera, titular de la La Alameda —organización que lucha contra el narcotráfico, el trabajo esclavo y la trata de personas—, se filtró el 23 de febrero de 2015 y en el que expresó: "ojalá estemos a tiempo de evitar la mexicanización. Estuve hablando con algunos obispos mexicanos y la cosa es de terror".
Vera explicó en entrevista posterior con la BBC que las palabras de Francisco eran "lo mismo que se referían los mexicanos cuando hablaban de colombianización de México. Es decir, a países democráticos y pacíficos que en determinado momento empezaron a tener problemas con el narcotráfico, no lo resolvieron a tiempo y después entraron en una espiral de violencia muy difícil de salir".
El gobierno de México envió una nota diplomática por lo que consideró una estigmatización y el Vaticano explicó que el asunto era un malentendido.
Pero a tres años de ese "malentendido", otro activista y argentino expuso los pensamientos del líder de la Iglesia católica sobre México.
Iván Añorve Jaimes y Germaín Muñiz García, ambos sacerdotes en Guerrero, murieron asesinados en una emboscada de un presunto grupo criminal por, según las investigaciones, creer que alguno de los sacerdotes tenía una relación con otro grupo rival.
"Todo Guerrero está en manos del narcotráfico. Hay un gobierno oficial, pero orden las cosas otras personas. Esas personas me hablan de una supermafia arriba", dijo monseñor Rangel Mendoza, de la diócesis Chilpancingo-Chilapa, en entrevista con Carlos Loret de Mola.
Con los asesinatos de Añorve y Muñiz ya son seis los homicidios de miembros de la iglesia en los últimos cinco años.
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